2.10.14

MUTILACIONES DE ANIMALES EN PROVINCIA DE BUENOS AIRES

 El fenómeno no es nuevo. La aparición de animales mutilados es tan común en la una amplia región de la provincia de La Pampa, que su denuncia sirve para las estadísticas que mensualmente arrojan cifras que varían entre 4 y 12 animales por mes.
Cuando el tema se da en otras regiones de forma aislada, llaman la atención y generan la intervención de organismos oficiales que reciben las denuncias y por tal motivo los hechos ganan cierto espacio en los medios y ahora, en las redes sociales.
La quijada del animal se observa con el clásico corte y la total
extracción de tejidos blandos. El hueso queda expuesto de tal
 manera que parece que hubiera estado años a la intemperie
En ese marco, es válido tener en cuenta el análisis apresurado que hacen algunos improvisados en las redes sociales que lanzan teorías descabelladas ignorando todo el trabajo de investigación de campo que algunos grupos han realizado pacientemente junto a especialistas y científicos que azorados no pueden dar una respuesta concreta al tema.
Vista del cogote del animal donde además del corte perfecto,
se observan las vértebras en una imagen que no fue común
en los casos registrados en La Pampa
El caso al que haré referencia hoy, se registró en inmediaciones de la localidad de Carlos Tejedor, provincia de Buenos Aires, aunque algunos investigadores mal asesorados, lo presentaron como ocurrido en la zona rural de Pehuajó, “provincia de La Pampa”, haciendo gala de un desconocimiento geográfico de las regiones de nuestro país. Si bien esto no tiene que ver con el eje central de esta crónica, no puedo dejar de mencionarla a fin de obviar improvisaciones que surgen en las redes sociales, en detrimento de la investigación seria y metódica que no parte de suposiciones, sino de hechos concretos.
El animal apareció en un establecimiento rural del partido de Carlos Tejedor y a primera vista, era uno mas de los tantos que se han producido, salvo, el detalle que pudimos observar en las primeras fotografías originales remitidas a este centro, donde se observan las vértebras del cogote del animal limpias, con ausencia total de piel, musculatura y aparato digestivo. Este hecho, es un detalle a tener en cuenta porque sería un corte relativamente “nuevo”, ya que en la mayoría de los casos registrados en La Pampa, la ausencia de tejidos blandos y órganos como aparato digestivo, auditivo, reproductivo, no habíamos observado la falta de musculatura y piel en el cogote de los animales.
Vista de la quijada del animal y las vértebras cervicales.
Lo importante es la postura no solo de los productores de la zona ante esto que según la cantidad de animales muertos podría constituirse en un flagelo, es la apertura y disposición de las fuerzas policiales de la región ante este hecho, lo que de alguna manera refuerza los términos de una reunión que hace cuatro años mantuvimos con especialistas en reunión realizada en la ciudad de Pehuajó, con el definitivo interés de lograr rescatar un animal mutilado con vida, para trasladarlo a la universidad mas cercana y realizar todos los estudios posibles.
"Hueco" en una de las patas del animal por el que extrajeron
parte de la musculatura.
Respecto al caso registrado en los últimos días del mes pasado, las fotografías remitidas por autoridad policial, son una clara muestra de lo que detalle en la crónica, acerca del estado en que quedó el cogote del animal y otro detalle interesante es uno en el que se observa un “hueco” en una de sus patas delanteras por el que le han extraído la musculatura.
A la brevedad ampliaremos la información.

26.9.14

CAZADORES SORPRENDIDOS POR UN SER GIGANTESCO QUE DESCENDIÓ DE UN OVNI

UN SER DE 2,50 MTS. DE ALTURA
Dos jóvenes cazadores se disponían los primeros días de septiembre a iniciar
Imagen ilustrativa de la interpretación del relato de los cazadores.
una jornada de acecho en un campo ubicado a unos 40 al SE de la ciudad de Santa Rosa, con la esperanza de poder cazar un chancho jabalí. La noche estaba serena y todo transcurría con normalidad. Los cazadores observaban el entorno, atentos a los silencios y los ruidos clásicos del campo… a la espera.
De pronto, la calma se rompió con el tropel de un jabalí que pasó frente a ellos a la carrera, en una actitud poco común ya que cuando llegan a las aguadas lo hacen expectantes porque presienten la proximidad de un cazador. Este animal corría desesperado y ellos, a pesar de estar atentos, no tuvieron tiempo ni siquiera de disponer las armas para dispararle.
Extrañados por el comportamiento del animal, redoblaron la atención y cuando habían transcurrido unos 15 minutos del primer episodio, se escuchó un tropel mayor, ya que entre 3 y cuatro jabalíes pasaron frente a ellos huyendo de “algo”. Su sorpresa no tuvo límites cuando una luz descomunal y enceguecedora que se desplazaba desde el SE, se detuvo a unos 30 metros de la posición en que se encontraban los cazadores y de su interior descendió un extraño ser “muy delgado” y lo que más les llamó la atención de acuerdo a la descripción, fue su altura que estimaron en unos 2,50 metros.
Aterrorizados los jóvenes no sabían que actitud tomar mientras el ser se acercaba y ellos no podían apreciar muchos detalles porque la luz los encandilaba de tal manera, que era imposible mirar sin cubrirse la vista. Uno de los jóvenes se desmayó, mientras que el otro, aterrorizado y al comprobar el estado de su amigo, recuerda que se puso “en posición fetal” y no sabe qué ocurrió después. No sabe cuánto tiempo estuvo en esa situación pero sí recuerda que cuando reaccionó, todo estaba oscuro.
Desorientado por la experiencia, sólo atinó a levantarse y a retirarse del lugar. Recuerda que había recorrido unos 20 metros alejándose, cuando advirtió que su amigo aún permanecía desmayado, por lo que regresó sobre sus pasos y lo reanimó para alejarse despavoridos del lugar.
El camino de regreso fue en silencio en plena madrugada. A su arribo a la ciudad, cada uno fue a su domicilio a descansar y al día siguiente, antes de relatar a sus familiares la experiencia, se sorprendieron al comprobar que sus rostros presentaban una coloración como si hubieran estado expuestos al sol de la playa durante varios días. Con ese argumento, sus relatos tuvieron un valor especial entre sus familiares, no obstante, optaron por mantener la reserva y dejar pasar unos días, observando la coloración de sus rostros que era la única prueba que contaban sobre la experiencia vivida.
El círculo de amistades comentó el episodio y así, gracias a otro cazador llegó a mis oídos y pude conocer detalles que por momentos son escalofriantes y que tiene muchos puntos en común con otros casos registrados en la región y que no han sido denunciados públicamente.
La sugerencia del CEUFO a los jóvenes que por el momento prefirieron no ir a ninguna consulta médica, fue poner a disposición de ellos la atención de una profesional relacionada con nuestro centro para hacer los chequeos necesarios, cuando ellos lo consideren y que en tal sentido, cuentan con apoyo y son la prioridad de cada una de nuestras investigaciones.
A la brevedad brindaremos un nuevo informe sobre la presencia de una extraña nave sobre la ruta Nacional nº 35 unos 25 km al norte de la ciudad de Santa Rosa que detuvo la marcha de varios vehículos en plena madrugada.
Hacemos saber a nuestros seguidores además que estamos elaborando un informe amplio en el que damos cuenta de las características de los seres que se han observado en la región en los últimos años y producto del estudio del CEUFO, cuyos tamaños son tan disímiles como sorprendentes, ya que se han denunciado seres descriptos como “hombrecitos” de apenas 15 cm de altura en un sembrado de maíz, hasta seres como el de este caso cuya estatura se estimó en 2,50 metros.


22.9.14

A 18 AÑOS DE "LA PERSECUSIÓN EN GUATRACHÉ"

A fines de septiembre se cumplen 18 años de caso emblemático de la ovnilogía regional y fue la persecusión por parte de un OVNI de una conocida productora rural de la localidad de Guatraché, con el chofer que conducía la camioneta y una joven que hacía de acompañante.
La experiencia está relatada a continuación y como ilustración, figura la nota enviada al responsable de CEUFO que por aquellos años se desempeñaba como cronista del diario La Arena. En el final de la nota, Alicia Bakken destaca la fecha de su nacimiento, el 1º de mayo y que además de hablar idioma ruso, también lo hace con fluidez con el idioma ucraniano.
Alicia Bakken compartió en el año 1999 su experiencia con los participantes del I Congreso Internacional de Investigadores que organizado por CEUFO se realizó en la ciudad de Santa Rosa en abril de 1999.













Alicia J.C. Bakken. Estancia La Minesota, Guatraché, La Pampa.

 “A las 7,45 pm entramos al campo. Un objeto luminoso de 8, 10 o 12 metros estaba casi a la entrada. Tres personas viajábamos en una camioneta gasolera: Juan Bergondi (52 años), Jorgelina Prost (17) y yo (75 años)” así comenzaba la misiva que me envió la Alicia J. C. Bakken poco tiempo después de protagonizar un impactante episodio en el campo de su propiedad conocido como “La Minesota”, a unos 19 km al SO de la localidad pampeana de Guatraché.
“Encárelo, le dije a Juan, el chofer. El objeto vino hacia nosotros y nos siguió hasta el casco de la estancia. Las agujas del tablero y los faros bajaron la intensidad de su luminosidad y al momento de hacer un giro en el camino con un ángulo de 90 º,  Jorgelina y yo vimos el plato volador con todas las características UFO. Venía sobre nosotros pero no veíamos detalles por la fuerte luz blanca  que irradiaba e iluminaba la casa del personal y galpones” detalló.
Más adelante describe que su hijo y administrador del establecimiento rural, Carlos Belcher, (40 años) venía más atrás y se fue “rajando” a Guatraché al comprobar que no era una linterna la causante de la luminosidad y recordó “yo había visto el video lanzado hace cuatro años así que estaba conciente del poder del OVNI”.
Al llegar a la casa, mientras ella entró “los otros dos se quedaron afuera y los perros aullaban a lo loco, las plumas de las palomas, pájaros, etc. volaban por doquier en un verdadero “pandemonium”” y enfatizó que “el OVNI se posó en un ciprés a más o menos 8 metros. Estuvo aproximadamente una hora y se alejó a las 8,30 u 8,45 pm rumbo a Victorica” y reconoció que su salud “no fue afectada” al cabo de la experiencia vivida, motivo por el cuál “el capataz durmió en la casa de servicio y nosotras dos a mas o menos 15 metros de distancia”.
La privilegiada testigo de esta historia que narró con lujo de detalles en una reunión que oportunamente mantuviera conmigo en la ciudad de Santa Rosa poco tiempo después, me permitió hacerme una idea sobre el comportamiento de una mujer que contaba con una rica experiencia de vida, ya que me contó que “estuve en la Segunda Guerra Mundial en Estados Unidos y periódicamente visitaba a Samuel Flagg Bemis, militar y profesor de la Universidad de Yale” y que además visitó “en la Bahía de New Hover Conn la fábrica Winchester, que por aquel entonces estaba fuertemente custodiada”.

La importancia del relato radica en que Alicia Bakken era una persona muy conocida en la región sudoeste de la provincia por su activa participación en distintas actividades sociales de la zona y quienes la conocían no dudan de su relato, que además contaba con el testimonio de sus dos acompañantes que resultaron directos partícipes del episodio registrado en noviembre de 1998.
Por aquel entonces como testimonio vivo de su experiencia quedó su relato grabado en una emisora de las ciudad de Santa Rosa adonde Alicia llamó y transmitió prácticamente en directo sus vivencias al llegar a la vivienda, para sorpresa no sólo del conductor del programa nocturno sino de la audiencia que al día siguiente buscó detalles en las páginas de los diarios regionales.


En ocasión de la realización del I Congreso de Investigadores del que participaron especialistas de Argentina y desde Chile llegó el inefable Jorge Anfrúns Dumont, Alicia Bakken hizo un viaje especial a la ciudad de Santa Rosa, sede del evento y compartió las deliberaciones y en uno de sus pasajes, expuso su experiencia con una serie de gráficos y un entusiasmo poco común. Su exposición culminó con un cerrado aplauso de los participantes que reconocieron la calidez de la protagonista de esta extraña historia producida, como tantas, en uno de los rincones desconocidos de La Pampa.

11.9.14

El OVNI como fenómeno sociológico

 El fenómeno OVNI ya está incorporado a la sociedad como un evento sociológico. Por mucho que les pese a los escépticos, ya es común no sólo en las ciudades sino en pequeñas poblaciones que la gente hable del tema. Y por supuesto, si eso ocurre también lo hacen los grandes medios de comunicación.
          Este comportamiento espontáneo e incontrolable a las decisiones de la ciencia, está más arraigado de lo que muchos suponen porque hoy los niños de cualquier escuela del interior hablan del fenómeno OVNI como un hecho natural, al que también se refieren los docentes que en algún momento también resultaron privilegiados testigos de un suceso o se ven en la necesidad de ofrecer una respuesta a los chicos.

En tuve oportunidad de recorrer buena parte del sur montañoso de Argentina, en el corazón de la Patagonia, dialogué con integrantes de la etnia Mapuche que vivía en las alturas y expresaron que siempre veían “esas luces”. No obstante, el testimonio de carácter antropológico más contundente fue el del cacique de la etnia Ranquel Carlos Campú, quien aseguró que “eso es algo natural”.
Reconozco que me sorprendió su respuesta en oportunidad de una visita al paraje Arbol Solo en medio del desierto pampeano. Imaginan ustedes la cara que habré puesto ante semejante respuesta y mi nueva pregunta surgió también espontáneamente: "¿Cóoomooo algo natural?" "Sí, de eso ya hablaban mis padres, mis abuelos y mis antepasados".
          La respuesta demuestra que este tipo de manifestaciones no son nuevas y mucho menos desconocidas para los antiguos dueños de estas tierras. Ellos de alguna manera estaban familiarizados con el fenómeno ya que tenía una "clasificación" según el color de "la luz".
          El propio cacique explicó que "si la luz es blanca o azulada" no hay que temer porque "esas son buenas". Mientras que si las luces son de color rojizo, "son malas", aunque no hay reportes que esas manifestaciones hubieran hecho daño a alguien en algún momento. Sólo se las denomina así porque supuestamente son las que "hacen daño".
          Más adelante se refirió al coraje demostrado por quienes se enfrentaron en algún momento de su camino a "la luz". "Si uno le tiene miedo, la luz se acerca", pero si uno no le demuestra temor la luz lo acompaña a cierta distancia, durante un trecho del camino, "luego se va", aseguró el aborigen.
        
          Este tipo de sucesos se repiten en la provincia de La Pampa, sobre todo en las poblaciones más alejadas. Los testimonios son variados y la calidad de los testigos también. Pero a esta altura creo que vale a pena definir el término "calidad de testigo" o "testigo de calidad".
          La comprensión del mismo es muy amplia. Testigo calificado no sólo es aquel que tiene estudios determinados y un cierto nivel de comprensión y preparación, sino también una persona desprovista de grandes conocimientos que relata con limitada terminología una experiencia vivida.
           Esta cuestión se planteó durante las investigaciones de los casos Sayago, Platner y Flores a principios de la década del ’80. En los tres se consideró la "calidad" de los protagonistas, ajenos a cualquier inclinación por los temas desconocidos como expectativas de publicidad.
            De hecho, los medios de la provincia de La Pampa le dieron un tratamiento muy cauto a cada uno de los temas, no así algunos medios nacionales que con espectaculares títulos sólo buscaron aumentar sus ventas sin importarles con el tiempo la suerte de los testigos.
            Esa actitud sirvió para que no sólo la gente sino los investigadores de la región tomaran una serie de recaudos a fin de evitar el desgaste de los testigos por parte de medios sensacionalistas que con su actitud no hicieron más que retraer la actitud que caracteriza a la gente del interior.
            En ese marco, no trascendieron una serie de casos muy importantes que se sucedieron a principios de la década del ´90 y que colocaron a la región al frente de las estadísticas de avistamientos durante un prolongado período.
Hay lugares donde la gente convive con el fenómeno de manera tal que tiene identificados "aparatos" a los que denominan según su tamaño como "casilla" o "castillo". La definición de casilla se aplica a un objeto alargado con muchas ventanas, que normalmente se desplaza a muy baja altura a tal punto que en algunos casos quienes recorren la zona deben detener sus vehículos ante la presencia de "la casilla" cruzando la ruta y descendiendo en la zona desértica.
La mayoría de los testigos observa las apariciones con respeto y las comenta en determinados círculos, pero está familiarizado con el fenómeno de manera tal que ya es una cuestión casi folclórica su presencia. El término "castillo" se aplica a "un aparato muy grande", mucho más grande que la casilla que muchas veces han visto emerger de los montes impenetrables y elevarse a gran altura hasta perderse en el espacio. Esto, según los relatos fue observado a las más variadas horas del día o la noche.
          Esos sucesos alentaron además a la elaboración de las primeras hipótesis referidas a la problemática y su incidencia no sólo en la geografía pampeana sino en su población. Por un lado, la "opinión propia" del común de la gente sobre una realidad innegable: la presencia OVNI en toda la región y por otro, la pregunta acerca del por qué transitan por aquí. Ese fue alguno de los interrogantes más comunes durante las reuniones mantenidas en distintas poblaciones del interior durante un ciclo de conferencias alusivas.
Con estos antecedentes podemos sostener sin temor a equivocarnos que el fenómeno OVNI no es una casualidad y que está definitivamente incorporado como un fenómeno sociológico.

El comportamiento de los medios de comunicación

Desde la aparición del fenómeno se ha producido un tratamiento diferente de la noticia en los distintos medios. En su mayoría tratan de obtener, como es lógico en el competente “mundo del rating”, la mayor cantidad de detalles, a fin de cumplir con una de sus primeras premisas: informar a la población.
En otros casos, intentan dar respuesta a un fenómeno que aún hoy es inexplicable y realizan análisis que rondan el escepticismo, amparados en soportes científicos, que tampoco pueden dar una explicación definitiva.
Los medios televisivos, salvo honrosas excepciones, intentan dar una imagen de duda a los casos que se presentan y en muchos ridiculizan a los testigos, lo que actúa en forma negativa para estos, sus allegados y las posturas ante potenciales nuevos casos.
Lamentablemente, y de manera especial la tv intenta presentar variantes que rayan en ocasiones con la ridiculez, ya que al no haber una respuesta real al fenómeno, deforman la realidad presentando alternativas ridículas que desmerecen al tema.
Algunos conductores “estrella” ridiculizan a los testigos y eso hace que la gente se retraiga y se cierre a brindar nueva información lo que dificulta  el trabajo de investigación. En oportunidades recurren a la opinión de los estudiosos pero finalmente, brindan una imagen distorsionada de los casos y en otras oportunidades, generan “mesas de análisis” a partir de opiniones enfrentadas entre supuestos científicos, escépticos e investigadores que nada aportan a la opinión pública, como si de una carrera se tratara y los debates terminan en su mayoría con polémicas que nada tienen que ver con la realidad de los casos presentados.
En raras ocasiones se limitan a brindar un informe sin que los propios conductores aventuren una opinión, sólo por el desconocimiento que tienen del tema, ya que no salen de los estudios cerrados a buscar en la calle los hechos reales. Eso no contribuye en absoluto con la investigación. Por el contrario, la gente se disgusta, se divide y se genera la confusión.
En el caso de los medios gráficos la cosa es diferente, ya que abordan los casos mas sonados durante dos o tres ediciones hasta que surge un nuevo tema que toman como eje.
Lo que no tienen en cuenta los medios es la calidad de los testigos, especialmente los del interior del país, donde la gente no tiene necesidad de “trascender” a los grandes medios nacionales, ya que viven su vida en la misma población y sólo cuentan con el respeto de sus vecinos que son los que en definitiva avalan su aporte por su trayectoria como poblador.
El intento de descalificación de los casos por los medios nacionales, es algo que tiene íntima relación con lograr un efecto espectacular y ganar más rating sin tener en cuenta el análisis de los hechos a nivel informativo.
En ese marco, la misma población es la que decanta cuáles son los medios que le dan un mejor tratamiento al tema, según la experiencia recogida a lo largo de 30 años de investigación.
Un párrafo aparte hay para los medios radiales que generalmente, “contagiados” por grandes producciones nacionales lo primero que hacen para dar marco a una noticia de este tipo es colocar como cortina musical el tema de la serie “Expedientes X” y según la capacidad y calidad del conductor, se inicia una nota que lejos de aclarar al oyente, lo confunden con su opinión que lejos está de ser válida por estar frente a un micrófono. Obviamente siempre hay honrosas excepciones de objetividad.
En definitiva, los medios regionales le dan un tratamiento “light” al tema, con el objeto que les permita vender un poco más. Los medios del interior tienen una inocultable influencia de los grandes medios nacionales lo que queda demostrado que “es noticia” cuando es espectacular y garantiza la venta. Y aquí vale hacer una nueva aclaración que siempre hay honrosas excepciones.

LA FUERZA DE LA FANTASIA
El comportamiento de los medios de comunicación es lamentable cuando le toca abordar un tema relacionado con la astronomía y más aún cuando se relaciona con el fenómeno OVNI.
Es increíble como los “opinadores” generan la incertidumbre en la audiencia o lectores, según el medio de que se trate, realizando crónicas que rayan entre lo sensacionalista y lo ridículo, para finalmente dar una estocada final, con una reflexión en la que intentan derrumbar el castillo construido con sus propias especulaciones.
Todo realizado sin el más mínimo rigor profesional o científico, porque no se tiene en cuenta el lector u oyente distraído que puede tomar las especulaciones periodísticas como información objetiva.
La reflexión es necesaria ante la caída en un meteorito o bólido en la región oeste de La Pampa y sur de Mendoza. Se trató de un fenómeno astronómico “natural”, pero no faltaron noticieros en los que con una música específica para generar misterio, se lanzaron al aire interrogantes sobre si podría tratarse de algo relacionado con el fenómeno OVNI. Sin dudas ese tema les podría servir para vender más ejemplares o en su defecto para capturar mayor audiencia.
Por supuesto a los dos días se olvidan del tema y abordan con el mismo espíritu otro.
Lo que resulta una postura cuanto menos hipócrita es que en oportunidades, algunos medios, por suerte hay honrosas excepciones, cuando sí tienen enfrente un fenómeno OVNI, pretenden vestirse con traje cientificista para investigar no el caso, sino al testigo utilizando frases sueltas y mordaces como “¿qué habría tomado este muchacho antes de contar esta historia?”.
Y lo más patético son las posturas de algunos medios del interior que, como si fueran de grandes ciudades, intentan ridiculizar a sus comprovincianos, lo que obviamente deja en claro la falta de profesionalismo, ya que olvidando su misión de informar, pretenden “formar” con falacias.
Como dije unos párrafos más arriba, por suerte hay honrosas excepciones.
A esta altura creo que sonará reiterativo pero nunca está demás recordar que “no todo lo que vuela es un OVNI” y que “no todo OVNI es de procedencia desconocida o extraterrestre”. Es fundamental que a la hora de hablar del tema, tengamos los pies puestos sobre la tierra porque sino, corremos el riesgo de convertirnos en uno de los tantos chantas que se dicen investigadores cuando en realidad, no salen de las grandes ciudades, jamás pasan frío ni se embarran los pies para hacer una investigación de campo.