El propietario del establecimiento se comunicó con el
CEUFO y envió una filmación del estado del animal que como en el anterior caso,
no da muestras de sufrimiento por la herida cauterizada y el faltante del pabellón
de su oreja derecha.
El caso se torna por demás extraño, teniendo en cuenta el
antecedente del año pasado y se descarta el ataque de pumas, especie que se ha
visto en los últimos tiempos en esa región, ya que con su destreza, podría dar
cuenta de un animal má.as pequeño.
Cabe recordar que el ternero del año pasado, murió casi
al mes de sufrir la extraña extracción, ante la dificultad constante para su
alimentación, al faltante la parte superior de su hocico.