Una pequeña perra propiedad del funcionario de una comuna del norte de La Pampa, apareció mutilada en el patio de la vivienda de su dueño, sin cabeza y sin órganos como el corazón y los pulmones, pero con la particularidad de que presentaba un corte casi lineal, sin desgarro alguno, y que ni su cuerpo ni el piso había restos de sangre
El extraño hallazgo fue confirmado por la familia que relató que el miércoles 3 de junio a las 7, cuando su hijo se retiró de la casa para dirigirse a su trabajo, la perra, de pequeño porte y color blanco, se encontraba en el patio como todos los días; incluso volvió a verla poco después, cuando ya en medio de sus actividades pasó por la vivienda.
La esposa del funcionario sacó a la vereda a otra pequeña perra de raza caniche alrededor de las 7,20 y no la vio, pero oyó su ladrido desde el fondo del patio, algo que no llamó su atención porque al parecer era habitual en medio de los juegos o “peleas” que el pequeño animal sabía mantener con otra mascota de mayor tamaño, en este caso una perra cruza con ovejero alemán de fuerte carácter, que normalmente está atada por temor a que ataque a algún caminante.
Alrededor de las 8 de la mañana, hallaron al pequeño animal sin vida y con gran sorpresa constataron que le faltaba la cabeza y la parte superior del cuerpo, como si la hubieran cortado prolijamente. Pero lo más raro es que no había sangre, ni el cuerpo de la perra estaba manchado ni había en el piso, alrededor de ella.
Un veterinario comprobó que al animal le faltaban algunos órganos como pulmones, corazón y las dos paletas.
El episodio causó conmoción y motivó la visita del Centro de Estudios UFO que registró el lugar, tomó fotografías y realizó las consultas con especialistas de la Facultad de Veterinarias. A pesar de haber transcurrido varios días, el animal no adquirió rigidez cadavérica ni emitía olor a putrefacción.
