Fuente: diario La Arena 3/12/2021
El diario La Arena, de la capital de la provincia de La Pampa,
abordó con objetividad el tema de la mujer desaparecida por 24 horas en una
localidad pampeana. Respetó los tiempos de la justicia y dejó de lado el
sensacionalismo. De la publicación se desprende lo importante: la mujer está
bien. Habrá tiempo para buscar una respuesta seria.
(Jacinto
Arauz) - Si bien todavía falta una parte importante de la investigación sobre
la desaparición de la mujer por 24 horas en Jacinto Arauz, como el peritaje de
los celulares, se conocieron nuevos detalles durante una entrevista que la
mujer concedió a La Arena. El más importante, que no habría una tercera persona
involucrada.
En el
campo donde se encuentra con su marido, Irma Rick relató su experiencia
ratificando lo ya contado a otro medio, que "se encontraba en la cocina
cuando el teléfono empezó a hacer rayas, se cortó la luz, ahí empecé a sentir
ese viento, salí con el teléfono en la mano, caminé unos diez metros, hasta
donde estaba el perrito atado y ahí no sé qué pasó. Es como que un viento me
chupó".
¿Qué pasó
después?
"Yo
vi luz, recuerdo que para mí estaba acostada, atinaba a abrir los ojos y veía
luces como de quirófano, esa luz blanca me volvía a cerrar los ojos. Para mi
estaba acostada". Ante la repregunta del cronista, dijo que "no notó
nada sobre qué estaba acostada ni la presencia de una sombra o algo
parecido". Más adelante dijo que después, "cuando me desperté sentí
como que algo me pasaba en la cabeza, me dijeron que era una peladura muy rara,
en la tomografía no salió nada. En los estudios salió todo bien, no hay una
tercera persona involucrada. Pienso que algo me metieron en la cabeza, tal vez
no se sepa nunca, puede que sea por todo lo que me pasó, pero pasa que cuando
ando caminando, es como que llevo algo pegado. Los primeros días me parecía que
iba alguien atrás mío" explicó a este diario.
Sentada.
Irma
manifestó que cuando despertó, "abro los ojos y me encuentro sentada, no
recuerdo que tiempo estuve sentada, me levanto, empiezo a dar vueltas y de
repente me toco y tengo el teléfono en la cintura, estaba prendido y con toda
la carga, eran las 5.10 de la mañana. El primer mensaje se lo mandé a mi hijo
pasada las 7 de la mañana, ahí reaccioné y empecé a mandar mensajes a los
chicos, llamé a unos cuantos, empecé a caminar, nerviosa porque los chicos me
llamaban y no podía hablar, le escribí a mi hijo: Pilín vení a buscarme que no
sé dónde estoy. No tengo recuerdo de cuanto tiempo, lo sé por mis hijos que
estuve 24 horas desaparecida. Para mí es como que pasó un montón de tiempo que
volví. Me dicen los chicos que estaba muy sucia, con mucho olor, como si me
hubiese orinado o algo así. Los chicos me dicen que llamé entre las 18 y las 19
del martes, que escuchaban como un zumbido, no tengo ni idea".
Recuerdo.
Irma fue
protagonista de otra historia en 2002. "Me acuerdo como si fuera hoy, de
hecho mi hijo siempre me dijo, te van a volver a buscar. Siempre tuve esa
sensación. Esa vuelta que vi al ovni o lo que fuera, yo estaba con un dolor de
muela que me moría, de ahí jamás tuve un dolor de muelas. Lo estuve mirando
como 5 minutos, en principio entraba una luz fuerte, me llamó la atención, abrí
el postigo y lo vi arriba del silo, se me cayó la linterna de la mano. Lo que
vi aquella vez que entre el silo y el objeto había unos dos metros, entre ellos
una luz y una figura o silueta de un metro que se mantenía en el medio",
concluyó.