Otro animal pareció mutilado en un campo en la región de Puelches, unos 280 km al sudoeste de la ciudad de Santa Rosa, capital de la provincia de La pampa. Se trata de un animal de raza Hereford que en la región se denomina “raza pampa”.
El animal presentaba los cortes clásicos en uno de sus maxilares, le faltaba una oreja y oído, un ojo, y le habían extraído completos todos los órganos del ano que permanecía en el establecimiento “Las Piletas”.
El puestero que se desempeña en la zona afirmó que “luces” se ven muy seguido en la región y que en el mes de abril, durante un atardecer caluroso estaba con su hijo en el patio y de pronto “se puso de día” cuando un objeto de gran tamaño y luminosidad se posó sobre uno de los corrales.
Aterrorizados los dos testigos ingresaron a la vivienda y observaron los movimientos del extraño artefacto que se mantuvo posado algunos minutos y luego desapareció a una velocidad vertiginosa hacia el espacio. En esa ocasión, ningún animal sufrió ataque alguno.
Un detalle que les llamó la atención fue que ni los perros se quisieron acercar al animal muerto, lo mismo que el caballo en que se desplazaba que se mantuvo a cierta distancia, por lo que debió aproximarse caminando al cuerpo muerto de la vaca.
El episodio no es extraño para ellos ya que en el ciclo 2002/03 fueron varios los animales muertos en los que se observaron los misteriosos cortes sobre los animales.
