26.2.21

UFOLOGÍA ANTROPOLÓGICA. ENTRE EL HOMBRE Y EL COSMOS


Como expresé la semana pasada, es tiempo de dejar la teoría y poner atención en los hechos. Por eso considero importante el título de este artículo (original) y la fotografía (original) en la que aparece el jefe de la Policía de General Pico, el protagonista de la historia, Sergio Pucheta y quien suscribe. Con sumo gusto la dedico a los seguidores de los grupos Ceufo Patagonia, Puente 2001, y a todos los investigadores de campo.
En algunos pueblos, la gente se refiere a los “platos voladores” con total naturalidad, estableciendo clasificaciones según sus características morfológicas y cromáticas de cada uno, tema que desarrollaré en un capítulo de esta obra.
Sin embargo, el hecho de abordar un trabajo de estas características no fue inspirado por un ufólogo sino por un antropólogo; Carlos Martínez Sarasola. Fue él, quien me estimuló para que transmitiera mi experiencia por escrito. Si bien los apuntes rebalsaban mi computadora con un desorden que sólo yo entendía, su propuesta fue el disparador para repasar las experiencias y, sobre todo, enriquecerlas con nuevos aportes de los testigos.
La posibilidad de entablar relaciones estrechas con los protagonistas me facilitaron el seguimiento de los fenómenos. Y aquí se produce una variante muy interesante. En la mayoría de los casos reportados, los encuentros se repitieron. Pero casi siempre los testigos prefirieron callarse o confiar su experiencia a un reducido círculo de personas. “Salvemos al testigo” fue siempre la consigna en estos casos, porque ellos eran quienes necesitaban del cuidado y las respuestas. Ellos eran los que se sentían incomprendidos o resultaban señalados.
En vistas a ese cometido, los trabajos de campo se realizaron con elementos mínimos, buena voluntad y la mente abierta en procura de hallar una señal; algo que nos orientara en la comprensión de cada caso. Si a esos potenciales elementos le sumamos los “diálogos” mantenidos con los testigos, sin duda alguna estamos ante lo que podría interpretarse como un mensaje cifrado que debemos decodificar.
Amén de la mente abierta, me resistí a admitir los informes que daban por sentado la procedencia y el por qué de la presencia de esos extraños visitantes. Con el paso del tiempo y lejos de entender esas señales, observé que las manifestaciones cambiaban. Y no sólo en cuanto a la tipología de los seres que había sido reportada sino también al vehículo. No necesariamente había un tradicional plato volador involucrado en las experiencias sino que ahora, los extraños entes se corporizaban y desaparecían con tremenda facilidad. Y no había otro elemento que “una luz” para relacionar ese encuentro con los seres de las experiencias consideradas como del Tipo IV.
A la hora de ordenar el copioso material acumulado, me di cuenta que debía realizar una introducción que permitiera al lector ubicar los distintos períodos que compondrían la obra. Y a esa altura, también entendí que el cúmulo de información era tal que debía sintetizarla. Y eso tal vez fue una nueva señal. Porque a la gente que le interesa el tema, sin dudas quiere la mayor cantidad de detalles posibles, por más que parezcan reiterativos.
Obviamente, la recopilación de esos testimonios no hubiera sido posible sin la predisposición de los protagonistas y sus familias, que en todos los casos me brindaron un apoyo fundamental durante mis visitas. Eso fortaleció mi postura de defender a ultranza la idiosincrasia de los testigos, que en la mayoría de los casos no querían publicidad, sino que buscaban pasar desapercibidos.
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Co

18.2.21

EL FENOMENO OVNI NO RESPONDE AL HOMBRE


La soberbia del hombre, de creer que el fenómeno OVNI debe responder a patrones establecidos por la raza humana, no es más que eso, una actitud soberbia. Porque el fenómeno se manifiesta cuándo, dónde y cómo quiere, sin responder a parámetros pre establecidos. Obviamente que menos responderá a teorías rebuscadas en que se pretende que el fenómeno es tan sólo una manifestación mental.

En ese marco, comienza un nuevo debate entre la gente que aborda honestamente el tema, superados los intentos de los youtubers, que acumulan horas y seguidores diciendo cualquier cosa que represente la posibilidad de “solicitar colaboraciones” para continuar con su objetivo, de sumar cantidades, pero nunca intentar una respuesta objetiva y menos seria del tema que nos interesa.

Así como en las últimas décadas del pasado siglo en que algunos “iluminados” pretendieron ser “voceros” de civilizaciones que nos visitan, prometiendo “ayuda” y “encuentros programados” con dudosas hermandades, argumentos que cayeron por su propio peso de no poder demostrar, hoy se instala un debate entre quienes analizan los “resultados” de grupos científicos armados por alguna potencia, con jugosos presupuestos, pero que jamás le contarán al mundo los resultados de sus investigaciones, porque es algo que guardan bajo siete llaves.

Mientras tanto, el fenómeno se sigue manifestando cada vez con mayor energía y originando una apertura en el común de la gente que está mas allá de la “guía” que en algún momento pretendieron ser algunos “iluminados”. Sí, la gente común, la que no recibió ningún presupuesto para estudiar ni presuponer algo sobre el fenómeno OVNI, está formando su propia opinión precisamente por la gran cantidad de aparición de naves convencionales en ciertas regiones del mundo.

Esto, obviamente da por tierra con los intentos de ilustrados que pretenden traducir, que la gente está viendo cosas que no son, cuando en realidad la gente ve lo que vé y los describe sin ningún tipo de esquema sugerido. Por eso la importancia de los testimonios de primera mano, los que obtienen los investigadores de campo, que lejos están de pasar horas leyendo investigaciones parciales sobre las que hacer una hipótesis o teoría, sin conocer la idiosincrasia del protagonista real.

Por eso, a esta altura de mi dilatada trayectoria como investigador de campo, creo que ha llegado el momento de dividir las aguas y dejar de lado las suposiciones subjetivas para abordar el tema como corresponde y no a la distancia. Eso permite a un investigador de campo dar prioridad al testigo, luego al suceso y por último a la interpretación o demostración del hecho.

Como síntesis, sostengo que se terminó el tiempo de las suposiciones y teorías trasnochadas. Ya es hora que los investigadores asuman la responsabilidad de hablar de lo que hacen con la propiedad que el tema OVNI lo amerita, partiendo de la premisa que el eje de la cuestión no es el hombre y sus extraños comportamientos.

 

8.2.21

OVNI, LA BUSQUEDA SIN FIN

Este artículo forma parte de uno de los capítulos del libro de próxima aparición “OVNI, La Búsqueda sin Fin” de quien suscribe. Sintetiza mi experiencia como investigador de campo. Que lo disfruten…


EL HOMBRE DE LOS PLATOS


          “¡¡¡Ehhh Quique Mario… yo vi un OVNI!!!” el grito provenía de un sujeto encapuchado que surgió de un grupo que realizaba el primer corte de una ruta nacional en la provincia de La Pampa, en reclamo de la liberación de varios jóvenes detenidos. Llegué al lugar cumpliendo con mi trabajo como redactor del diario La Arena y luego de conversar con el líder del grupo, uno de los jóvenes encapuchados se me acercó y me relató su experiencia. Me parecía increíble recibir su testimonio en el marco de un corte de ruta, en el año 1995, rodeado de encapuchados que blandían palos y piedras frente a la presencia policial. La escena tenía sin dudas ribetes surrealistas.

          Sin embargo, caí en la cuenta que era innegable que me había convertido en un referente en lo que hace a la investigación y difusión del tema. Ellos me conocían porque escuchaban de niños el programa “Universo tres… temas del tercer milenio” que en forma ininterrumpida realicé durante 6 años (1976 – 1982) por LU 33 Emisora Pampeana, la única emisora comercial de amplitud modulada de la región por aquel entonces.

          Este tipo de anécdotas se repiten aún en la actualidad, pero otra digna de mencionar sucedió cuando llegué en uno de mis innumerables viajes, en el mes de enero de 2001, a un establecimiento en plena zona de monte. Apenas descendí del auto para abrir la tranquera que me conducía al guarda patio de la casa, escuché el grito del encargado del lugar “Quique Mario… anoche tendrías que haber venido… porque anoche pasó el OVNI…” de inmediato giró su cabeza y le gritó a otro hombre que desarrollaba tareas a unos cien metros del lugar “Felipe!!! Vení, contale a Quique Mario lo que vimos anoche…”. Y con esa espontánea bienvenida, se desarrolló el relato por parte de los protagonistas no de una historia, sino de decenas de observaciones. En este caso en particular afirmaron que “anoche, poco antes de las 10, cuando estábamos juntando las cosas para ir a comer, vimos venir el OVNI… era redondo, como un plato, muy grande, calculo que mas de 50 metros de diámetro… volaba bajito, muy silencioso… se veían ventanillas redondas y cada tanto, iluminaba el monte con un flash como si sacara fotos… lo vimos hasta que desapareció hacia el este”.

          Y otro aporte risueño de las comunicaciones insólitas fue el de un vecino de la localidad de Puelches que en una oportunidad me llamó por teléfono reclamando “Quique Mario, cuando vas a venir… acá vemos platos voladores todos los días…” como si mi presencia fuera a darles una respuesta contundente, pero expresado en el sentido que ellos querían compartir la experiencia con alguien que se dedica a estudiar el tema.

          Anécdotas, eso son lo que no podían dejar de ser parte de este trabajo. Sin darme cuenta, me había convertido en referente en la región pampeana. La mención de un caso relacionado con platos voladores, irremediablemente se relacionaba con mi nombre. Y eso es algo que pude comprobar en mis recorridos por distintos sectores de la región, en diferentes épocas del año.

          Eso también me dio argumento para sostener que los platos voladores constituyen un  fenómeno sociológico y mucho más. En algunos pueblos es algo folklórico. Y la gente se refiere a ellos con total naturalidad y los relatos se asocian y permiten establecer clasificaciones según las características del “plato volador”, tema que desarrollaré en un capítulo de esta obra.

          El hecho de abordar un trabajo de estas características, en el que pudiera volcar la experiencia recogida en más de 40 años en los que recorrí de miles de kilómetros en distintas direcciones como investigador de campo, fue inspirado en el aliento que me brindó el antropólogo Carlos Martínez Sarasola para que transmitiera mi experiencia. Si bien los apuntes retozaban en mi computadora, con un desorden que sólo yo entendía, la propuesta fue el disparador para comenzar a repasar las experiencias y enriquecerlas con los nuevos aportes de los testigos años después…

 

25.1.21

UN OVNI SOBREVOLÓ EL SUR DE SANTA ROSA


Un colaborador del Centro de Estudios UFO confirmó que hoy, lunes 25 de enero a las 5,25 de la mañana vió un OVNI volando “lentamente” con dirección NO-SE y de considerable tamaño, ya que lo comparó muy gráficamente como “15 veces más grande que una estrella de las más grandes”

 

El relato fue realizado por un colaborador del CEUFO que en otras oportunidades resultó testigo de otras experiencias, por lo que su forma de explicarlo fue ágil “vi un ovni en mi barrio con mucha luz blanca…iba despacio” y reconoció que no quiso sacarle una foto por temor a “atraerlos”.

 

El testigo se levanta a esa hora cada día para ir a trabajar y cuando salió al patio, se sorprendió por la presencia del extraño objeto “se veía como a la altura que pasan los aviones quizás un poco más alto, pero iba lento y era muy llamativa la potente luz blanca” y agregó que su desplazamiento era tan lento que le dio la sensación “que estuviera buscando algo”, a la vez que se percató “que no se escuchaba ningún tipo de sonido”.

 

Consultado acerca del tamaño, si lo tuviera que comparar con una estrella, aseguró que “era mucho más grande, calculo unas 15 veces más” y agregó “las estrellas se mantenían en su lugar, por eso se apreciaba el desplazamiento del objeto” y afirmó que “a esa hora todavía está oscuro y se notan las diferencias entre las estrellas y un objeto”.

(FOTO ILUSTRATIVA DE ARCHIVO)

 

23.1.21

ALERTA OVNI: POSITIVO


La primera jornada de Alerta Ovni organizada por el grupo CEUFO PATAGONIA, se desarrolló entre las 21 y las 0 hora del viernes 22 de enero y como saldo positivo. Se destacó la observación de un fenómeno que hasta ahora el CEUFO no había experimentado y es la presencia de un “haz de luz” descendente, de origen desconocido.

El puesto se instaló en el cruce de la Ruta 14 y el acceso sur de la localidad de Toay, una zona alta y con baja incidencia de reflejo lumínico, rodeada de monte de caldén. La brisa constante trajo alivio a las altas temperaturas del día, superiores a los 35 grados y el cielo estaba completamente despejado. A las 21,48 se observó en 3 oportunidades hacia el NO de nuestra ubicación, los denominados “Pulsos de Luz”, cuya manifestación fue descubierta en mayo de 1994 en el oeste de la provincia de La Pampa. Meses después, en contacto con investigadores chilenos, llegamos a la conclusión que se registraba únicamente en el centro de ambos países y con el tiempo se extendió a otras regiones.

El recuento de satélites surcando el cielo superó la cantidad de 20, pero lo más sorprendente fue cuando varios de los participantes observaron lo que luego denominamos “Haz de Luz” que en principio comparaban como una estrella fugaz, pero, conociendo lo básico de astronomía “no era una estrella fugaz”.

Cuando observé la tercera manifestación del “Haz de Luz”, de corta duración (entre 3 y 4 segundos) advertí que se trataba de una luz con débil brillo, con un ancho superior al de una estrella fugaz y trayectoria descendente. Para ser más gráfico, como si “alguien” iluminara con un puntero láser de arriba hacia abajo.

La jornada culminó poco antes de la 0 hora y fue considerada como positiva, no sólo por el reencuentro con la actividad de campo, sino también por haber compartido en el lugar más de 20 personas, a las que se sumaron puestos de observación en distintos barrios de la ciudad de Santa Rosa y otros puntos de la provincia de La Pampa, sino también de varias ciudades de la Patagonia como El Bolsón, Puerto Madryn, entre otras.

(foto obtenida por Lucía anoche, unos 50 grados al NO de nuestra posición. Quedó registrada en lente de su teléfono una luz en movimiento, imperceptible a los presentes).

21.1.21

UN “TREN” DE LUCES


Un tres de luces surcó el cielo oeste de la ciudad de Santa Rosa, capital de la provincia de La Pampa, poco antes de las 21,30 del miércoles 20 de enero. La descripción minuciosa del testigo, permitió descartar de plano el supuesto paso de los satélites “star link” que sorprendieran a miles de personas a principios de 2020. Ya no viajan en formación y su paso es poco menos que perceptible en la actualidad.

La formación, descripta “como una manguera transparente de iluminación” con luces que en algunos casos emitían destellos, permitió evaluar la posibilidad de confirmar algo que se esperaba en el mes de noviembre y a lo que estuvieron atentos un grupo de investigadores argentinos, con el convencimiento que no se trata de satélites, el primer argumento que los improvisados sostienen.

La formación se desplazaba a regular velocidad con dirección NO-SE y permitió advertir a investigadores de la Patagonia, especialmente de la costa atlántica por la dirección. Esperamos novedades en las próximas horas.

(FOTO ILUSTRATIVA DE ARCHIVO)

 

20.1.21

UN OVNI ENTRE MÚSICOS



Una tarde llena de música, terminó con una sorpresa al momento de bajar las fotos obtenidas con los teléfonos, cuando advirtieron que había “algo” no convencional en la imagen captada. Se trata ni más ni menos de un OVNI, imagen que pasa desapercibida al ojo humano pero queda registrada en las cámaras.

El episodio se produjo el pasado sábado 16 en un centro cultural de la localidad de Anguil donde un grupo de músicas y músicos disfrutaban de la jornada. Agradecemos el envío al CEUFO para su análisis, no obstante, este tipo de imágenes son más frecuentes de lo que suponemos y reafirma lo que sostenemos hace años: “el fenómeno ESTA AHÍ”.

 

 

16.1.21

OTRA VEZ LAS MISTERIOSAS ESFERAS



Extrañas esferas que hacen apariciones repentinas en distintas horas del día y la noche, sorprendieron a vecinos de Santa Rosa y Toay en los últimos días. Afortunadamente un integrante del CEUFO pudo captar mientras filmaba la proximidad de la tormenta, una de estas esferas en una filmación.

Se produjo alrededor de las 9 de la mañana del 15 de enero al SE  de Santa Rosa y se observa cómo una de estas misteriosas esferas se pierde entre la tormenta. Alrededor de las 22 horas, varios testigos de la zona de quintsas entre Santa Rosa y Toay, detectaron la presencia de esferas que describieron como “similares” a las captadas durante la mañana.

Sin embargo, otro testigo que circulaba por una avenida de la localidad de Toay, observó algo que definió como “una Luna” pero no en su totalidad, sino que de acuerdo a la iluminación, parecía una “Luna en cuarto creciente”. De este testimonio se desprende la posibilidad de considerar que se trataba de un objeto de gran tamaño que volaba a considerable altura, por eso la iluminación le daba forma de “cuarto”.

La reaparición del término “Luna”, rescata del archivo del CEUFO PATAGONIA la interesante cantidad de casos de viajantes que circulando por la enigmática “Ruta del Desierto” o la misteriosa “Ruta 10” describieron los desplazamientos de “una Luna llena” aún cuando la Luna real estaba a la vista de ellos. O los invalorables testimonios de niños de las escuelas albergue del Oeste Profundo, cuando llamaban a su maestra para avisarle que “ahí va pasando la Luna”.

La manifestación de este tipo de fenómenos se da con inusitada frecuencia no sólo en nuestra región, sino en el resto de la Patagonia en los últimos meses, lo que favoreció la formación de una red de investigadores de toda la Patagonia y generó la coordinación de un grupo que cubrirá toda la provincia de La Pampa.

 

 

13.1.21

EL PRIMER OVNI DEL AÑO


Una familia que en la madrugada del 3 de enero circulaba por la ruta Provincial 20 o “Ruta del Desierto”, fue protagonista de un contacto del Tipo I de acuerdo al relato que realizó al CEUFO PATAGONIA, lo que se constituye en uno de los primeros casos del año en la región.

 

“Sucedió el fin de semana pasado, más específicamente entre la medianoche del sábado y la madrugada del domingo 3/1/2021. Antes de relatar el suceso debo aclarar que no somos fanáticos del fenómeno ovni ni detractores tampoco. Más bien personas abiertas a las múltiples posibilidades del universo. Aclaro esto para que se entienda que no buscamos fama, sino más bien respuestas”.

 

Sin dudas esta presentación describe a los testigos y en su desinterés en aparecer en los medios amarillistas o en la fantasía de algún youtuber que tataría de aprovechar el testimonio para ganar seguidores. El escenario, es una solitaria y oscura ruta donde se han registrado gran cantidad de avistamientos y es una de las zonas consideradas “clave” en la investigación de este tema por nuestro centro.

 

“Como comentaba, en la noche del sábado 2/1 retornábamos con mi marido a Neuquén atravesando la ruta 20 de la Pampa, entre las localidades de La Reforma y 25 de Mayo. Aproximadamente en el km 300 quedamos atónitos ante la presencia de lo que percibimos como un objeto suspendido en el aire, a escasos metros del suelo, su centro era oscuro, no pudimos distinguir si se trataba de un objeto compacto o si era hueco. Tenía una hilera de luces que giraban formando un semicírculo en su parte inferior y se apagaban al llegar a la mitad. Para ser más gráfica, se veía como si fuera una “vuelta al mundo” pero las luces se encendían en lo que serían las 3 de un reloj y se apagaban a las 9.No puedo precisar si su forma era circular o si era medio circulo en realidad, dado que el ojo tiende a completar las figuras incompletas y era noche cerrada.”

 

La descripción que realiza la testigo es brillante y de una solidez, que permite trabajar comparativamente con otros casos registrados en la región. Mas adelante destacó “soy una persona muy imprecisa para las dimensiones y distancias, pero me dio la impresión de no estar muy lejos de la ruta (tal vez 100 metros o menos). Lo vimos mientras nos acercábamos, tal vez durante 300 metros y antes de llegar a la altura donde se encontraba desapareció. Nos dimos vuelta para mirar hacia atrás y no había nada. No nos animamos a detener el vehículo y seguimos. Muy sorprendidos y un poco asustados. Para descartar hipótesis hicimos el tramo de día para cerciorarnos de que no haya alguna construcción en el lugar que se haya prestado para la confusión pero no hay nada por esos kilómetros. La verdad, lamento no haber tomado fotografías, pero como decía, nos tomó absolutamente por sorpresa.”

 

El excelente relató finalizó expresando la experiencia entre la gente de su entorno “es un tema tan delicado que las pocas personas con las que lo hemos comentado nos miran con incredulidad. Mi gran duda es si por casualidad ustedes han recibido información de casos similares en esa zona o si conocen casos que coincidan con nuestra descripción del objeto. Les agradecería muchísimo su respuesta y de antemano les agradezco su tiempo por leerme. Cecilia…”

 

 

23.11.20

SERIE DE AVISTAMIENTOS OVNI EN LA PATAGONIA



La serie de avistamientos OVNI en el norte de la Patagonia, llamaron la atención de centenares de testigos que en muchos casos lograron registrar una serie de imágenes de distinta calidad. En los últimos 15 días los llamados al Centro de Estudios UFO de La Pampa que trabajó en coordinación con ICOU Patagonia (Investigadores de Campos Ovni Unidos), se lograron decenas de fotografías y además, certificar la intensa actividad en los cielos.

En ese marco, una de las fotos más impactantes se registró en El Bolsón, donde se observa en el atardecer un objeto de gran porte y con características que llamaron la atención de los investigadores, que ilustra este informe.

Mientras tanto, en la provincia de La Pampa, además de una interesante filmación lograda sobre la emblemática Laguna Don Tomás en la madrugada del 26 de octubre, decenas de testigos denunciaron la presencia de luces durante varios días y en distintos horarios.

En la noche del sábado y madrugada del domingo, varias luces realizaron un verdadero show con recorridos del que dieron testimonio un grupo de jóvenes que intentaron filmar y fotografiar el evento, no obstante ofrecieron interesantes gráficos con los recorridos de una cantidad indeterminada de luces, que a la postre se redujeron a 2 y se mantuvieron en permanente movimiento realizando un recorrido fijo de ida y vuelta durante varios minutos.

Mientras tanto, en la ciudad de General Acha, 100 km al sur de Santa Rosa, otro testigo captó dos interesantes imágenes en medio de la nubosidad, que serán analizadas con detenimiento.

En tanto un representante de CEUFO en la provincia de Buenos Aires recibió además, una serie de imágenes captadas en la localidad de Carhue y zonas rurales, donde a plena luz del día se observa el desplazamiento de varios objetos.

18.8.20

ARCHIVO CEUFO: LA ESTAMPIDA DE 1994

 

          Una inexplicable y gigantesca estampida de animales conmovió el norte de la provincia de La Pampa en la madrugada del lunes 8 de agosto del año 1994. Poco antes de la medianoche, testigos de la localidad de Realicó confirmaron al Centro de Estudios UFO que el cielo permanecía nublado y la serenidad del medio ambiente presagiaba una fuerte tormenta.

          Lo inusual de la experiencia que vivirían. radicó en que desde distintas localidades del norte provincial, los testimonios coincidían en que se escuchó una potente explosión “como si fuera un trueno pero multiplicado en su potencia natural”. Poco después se desató un aguacero que abarcó una amplia región del norte de La Pampa y sur de Córdoba.

          El extraño fenómeno afectó a cientos de animales de la región, que ante lo desconocido reaccionaron en una furiosa estampida que dejó como consecuencia alambrados caídos y centenares de animales diseminados por la región, fuera de las propiedades a las que pertenecían y a la mañana siguiente, los productores debieron redoblar esfuerzos con la colaboración policial para reunir su tropa y regresarla su lugar de origen.

          Los conocedores de la región y del comportamiento natural de los animales, destacan que ante una tormenta los vacunos se reúnen en grupos con su parte posterior hacia la tormenta a fin de soportar un potencial temporal. Pero en este caso, algo motivó la reacción de espanto del ganado que emprendieron loca carrera derribando alambrados en claro intento por alejarse de “algo”.

          Sin embargo un detalle interesante no escapó a los ojos de los baqueanos que trabajaron arduamente en procura de recuperar la hacienda, quienes afirmaron que en algunos sectores los alambrados permanecían caídos en dirección al norte y en otras zonas, el mismo ganado había derribado las contenciones en la dirección contraria lo que permitió evaluar la posibilidad de que algo había sobrevolado la región a baja altura, con dirección norte-sur, y que luego de superar esa posición, los animales intentaron volver, al comprobar el paso de la extraña y gigantesca masa de luz que decenas de testigos observaron.

          La mañana del 8 de agosto el panorama era desolador. La mayoría de los corrales yacían en el piso y los alambrados con huellas de haber sido embestidos por los animales que rara vez muestran ese comportamiento, sobre todo ante la presencia de un fenómeno natural como lo es una tormenta.

          La reacción no implicó sólo al ganado vacuno, sino también a los equinos y no hubo que lamentar mortandad como erróneamente informaron algunos medios de la época y las consecuencias fueron lesiones en los animales que atropellaron los alambres.

          Esa mañana se inició una tarea que duró días, ya que los animales se mezclaron y con buena voluntad de los productores intercambiaron las piezas que comenzaron a trasladar a sus lotes originales.

          De acuerdo a la reconstrucción del episodio que realizó el CEUFO, la estampida habría comenzado al norte de la localidad de Winifreda, unos 40 kilómetros al norte de la capital pampeana y se extendió hasta la zona rural de Realicó, cubriendo una extensión de unos 140 kilómetros de largo, por una franja estimada en unos 20 km de ancho.

         

Recorrida

 

          Cuando iniciamos la recorrida, nos encontramos con decenas de testimonios que coincidían en la potencia de la explosión, especialmente en la zona de Embajador Martini, Luiggi, Parera y Realicó. Los testigos de esta localidad afirmaron que “estaba todo muy raro, muy calmo” al atardecer, pero especialmente en las primeras horas de la noche, lo que hacía presagiar un temporal de importancia.

          Durante la tormenta, algunas poblaciones sufrieron el corte de energía eléctrica que en algunos casos duró varias horas y recién se restableció a la mañana siguiente.

 

Una luz en la tormenta

 

          Dentro de los testimonios, uno de los más significativos desde mi punto de vista, fue el de una familia de la localidad cordobesa de Huinca Renancó que regresaban luego de compartir la tarde con familiares de Realicó y advirtieron la proximidad de la tormenta, mientras circulaban por la ruta Nacional nº 35 con dirección sur-norte, a baja velocidad, el conductor, una persona mayor (65 años) advirtió que el rodado tenía una cubierta trasera pinchada por lo que decidió detener la marcha. Las primeras gotas de lluvia lo oblogaron a permanecer en el rodado y a los pocos minutos la lluvia era torrencial. En esas circunstancias estaba junto a su esposa cuando advirtieron que “adentro de la tormenta”, se desplazaba un objeto que definieron como “gigantesco”, que irradiaba una potente luminosidad y, conocedor de la zona, aseguró que nunca vio “nada igual”, porque se desplazaba lentamente dentro de la tormenta con dirección sur-norte. Eso los decidió a permanecer en el lugar hasta avanzada la madrugada y al cesar la lluvia, cambiar el neumático y continuar su viaje.

 

Camioneros

 

          Dos camioneros (padre e hijo) que en sendas unidades se desplazaban por la misma ruta Nacional nº 35 desde Córdoba a la capital pampeana, separados entre sí por varios kilómetros de distancia, y cuando aún les faltaba unos 100 km para ingresar a La Pampa, coincidieron en afirmar que “una luz gigantesca” volaba con dirección sur-norte y “se internó dentro de la tormenta” y se manifestaron convencidos que “la luz bajó en algún lugar” por la clara maniobra de descenso que ellos advirtieron desde su posición.

 

Una carpa en medio del campo

 

          Otro testimonio significativo brindó una familia de la ciudad de Santa Rosa que en la madrugada de ese 8 de agosto regresaba de la provincia de San Luis. Cuando ya habían ingresado a La Pampa circulando en automóvil por la ruta Nacional 35 con dirección norte-sur, advirtieron la presencia de lo que compararon con “una carpa gigantesca” en medio del campo, a su derecha, en lo que estimaban era el predio rural que cuenta en la zona la Escuela Agrotécnica.

          En sus primeras especulaciones estimaron que podría tratarse de una carpa montada para realizar alguna actividad pero al cabo del viaje, se dieron cuenta que la extraña figura que su imaginación les sugería una carpa, también se desplazaba en su misma dirección y dentro de la zona rural.

          Ante la extrañeza de la observación decidieron guardar silencio y continuar la marcha hacia Santa Rosa. A su llegada, y conociendo las noticias de una descomunal estampida de animales en la zona norte de la provincia, el jefe de familia se comunicó telefónicamente y acordamos una reunión donde me brindó parte de los detalles que expresé en párrafos anteriores.

 

Reflexión final

 

          La decenas de testimonios recogidos en la zona que coincidían en destacar la “potente luminosidad den el cielo” y “dentro de la tormenta”, sumado a la tremenda explosión de la que no hubo una explicación oficial, reafirma la teoría de la presencia de un OVNI de considerables dimensiones sobrevolando la región con una dirección establecida sur-norte.

          La falta de antecedentes de episodios similares no sólo en la región sino en todo el país teniendo en cuenta el área afectada, habla a las claras de un misterio que aún persiste.

          También es de destacar que los animales están acostumbrados a las manifestaciones climáticas de la región y todos saben que cuando se aproxima un temporal, los animales como forma de soportar el mal tiempo se agrupan y “ponen el culo” hacia tormenta como defensa natural ante un fenómeno conocido.

          Sin dudas la estampida fue causada por “algo” no convencional, lo que provocó la reacción de los animales que intentaron alejarse de la zona, arrasando alambrados. En este caso, lo común hubiera sido que todos corrieran en la misma dirección y en principio así lo hicieron, lo que explica que los alambrados fueron forzados hacia el norte. Misteriosamente, en loca carrera el ganado intentó volver sobre sus pasos y arrasó las contenciones en la dirección contraria, cuando el OVNI superó la posición de la manada descontrolada.

4.8.20

APARECIÓ UN TERNERO PARCIALMENTE MUTILADO


Un ternero de apenas 4 días, apareció con el faltante de una de sus orejas en el tambo ubicado al este de Realicó, en el norte de la provincia de La Pampa, donde el año pasado, otro ternero sufrió el faltante de la parte superior de su hocico.

El propietario del establecimiento se comunicó con el CEUFO y envió una filmación del estado del animal que como en el anterior caso, no da muestras de sufrimiento por la herida cauterizada y el faltante del pabellón de su oreja derecha.

El caso se torna por demás extraño, teniendo en cuenta el antecedente del año pasado y se descarta el ataque de pumas, especie que se ha visto en los últimos tiempos en esa región, ya que con su destreza, podría dar cuenta de un animal má.as pequeño.

Cabe recordar que el ternero del año pasado, murió casi al mes de sufrir la extraña extracción, ante la dificultad constante para su alimentación, al faltante la parte superior de su hocico.


20.7.20

YOUTUBERS, LOS NUEVOS “INVESTIGADORES DE ESCRITORIO”

Una nueva “especialidad” de “investigadores de escritorio” se ha popularizado, a partir de las redes sociales. Hoy es común que muchos dispongan de “un canal en youtube” para hacer entrevistas sobre determinados temas, en este caso: OVNI.

Es así como se pueden apreciar decenas de propuestas de “periodísticas” que concretan entrevistas para abordar el tema y se logra una simbiosis extraña, porque en ese marco, aparecen ignotos “investigadores” que se presentan como “especialistas” de algunos rubros que favorecidos por la espontaneidad y la virtualidad, hablan como si dispusieran de documentación que los avale, de la que obviamente carecen.

En lo personal y con 45 años en la profesión de Periodista, veo con tristeza como supuestos colegas hablan con liviandad de mutilaciones de animales, abducciones y casuística, sin haber pisado una zona rural alejada de las grandes ciudades y conociendo de vacas, los cortes que se exhiben en una carnicería.

Posiblemente mis dichos molesten a alguien pero, a esta altura de la historia de la Ovnilogía Nacional, no se pueden dejar pasar por alto las improvisaciones y mucho menos los fraudes, de gente que habla sin conocer la geografía ni la idiosincrasia de los protagonistas y testigos, ni cifras y ni siquiera han entrevistado a científicos para cotejar la información.

La investigación seria, se ostenta a partir de la cantidad de kilómetros recorridos en pos de la verdad y no leyendo (copiando y pegando) los informes de los que trabajan en la investigación de campo. Tampoco es investigación recopilar y hablar sobre dudosos informes que se disponen procedentes de otros lugares, que en su mayoría llegan contaminados por los intereses de sus autores y sus sponsors.

En las últimas semanas recibí varias “invitaciones” para participar de algunas entrevistas y me abstuve de hacerlo con el objetivo de organizar la difusión a través de una serie de conferencias virtuales, sin filtros y con la documentación que me habilita para hacerlo. Porque al cabo de 18 años trabajando a destajo investigando animales mutilados, prefiero brindar la información con objetividad propia.

A esta altura, tengo que confirmar que de todos los que hablan del tema improvisadamente, ninguno ha hecho referencia a las consecuencias sufridas por algunas personas que trabajaron en el tema y que han sido comprobadas científicamente. Es hora de dejar de lado las improvisaciones y los fraudes y en ese sentido, soy consciente que este post pueda molestar a esos improvisados que en sus canales se vanaglorian como “grandes investigadores” pero a la hora de mostrar las pruebas, hacen agua, porque científicamente no tienen ningún respaldo y no convencen las cortinas musicales y las improvisaciones, que le restan credibilidad a un tema que está mucho más allá del vedetismo de algunos personajes.

Señores, señoras, el tema central es el OVNI, sus tripulantes y el objetivo de su llegada a nuestro planeta, no de producciones farandulescas sin el mínimo rigor científico.